AUTOR: RUDY VLADIMIR GUARACHI COTA
Lastimosamente la ciudad de El Alto ha sido víctima del abuso indiscriminado de la propaganda y publicidad excesiva y es que la mala cultura ciudadana provoca estas deficiencias.
Es algo común pasar por las calles Alteñas observando las paredes llenas de afiches, pósteres o panfletos colados con engrudo. Los árboles también son víctimas de este problema.
Se perdió el interés en coadyuvar la aplicación estricta de reglamentos por parte de la Alcaldía y de los demás actores sociales. Lastimosamente nuestra cultura nos ha vuelto muy dependientes de las instituciones públicas.
Es algo común pasar por las calles Alteñas observando las paredes llenas de afiches, pósteres o panfletos colados con engrudo. Los árboles también son víctimas de este problema.
Poco a poco se ha hecho algo natural colar alguna propaganda para impulsar una actividad comercial desde colegios, organizando fiestas, hasta empresas ofreciendo productos. Y la cosa se pone peor en época de elecciones políticas, pues los movimientos políticos no respetan, tanto la propiedad privada como la propiedad pública.
Se perdió el interés en coadyuvar la aplicación estricta de reglamentos por parte de la Alcaldía y de los demás actores sociales. Lastimosamente nuestra cultura nos ha vuelto muy dependientes de las instituciones públicas.
Algo se tendría que hacer para erradicar este problema. Todos los ciudadanos tienen que ponerse la mano al pecho y empezar a trabajar por la ciudad. No se descartaría que las Universidades, centros y colegios Alteños impulsen proyectos ciudadanos de mejoramiento y capacitación integral.
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